Reparaciones de fontanería. Tapas de tuberías

Muchas veces tenemos tuberías de PVC que ya no usamos o hemos realizado una reforma y el agua ya no pasa por allí. Es posible que se nos plantéen dudas sobre qué hacer con ese tipo de conductos. Sin duda son reparaciones de fontanería que nunca apetece hacer pero es preciso ponerse manos a la obra para dejar selladas tuberías que podrían dar problemas si las dejamos abiertas.

 Hay diversos métodos para proceder a este sellado. El mercado pone a nuestra disposición distintas tapas de todo tipo que se pueden adecuar a nuestros propósitos. Si lo que queremos es cancelar de manera permanente la tubería, podemos comprar una tapa e impregnarla de adhesivo para que cierre definitivamente el conducto e impida la entrada o salida de elementos no deseados. Sin embargo, si no estamos seguros sobre la disponibilidad de la tubería y es posible que la volvamos a utilizar en un futuro, es mejor optar por tapas de cierre con palomillas. La insertamos en el agujero de cierre y damos vueltas a las palomillas en el sentido de las agujas del reloj hasta que encaje perfectamente. Con este sistema nos aseguramos que podemos abrir la tapa cuando queramos. Con girar las palomillas en el sentido contrario podremos abrir de nuevo la tapa. Es un sistema muy sencillo y eficiente para dejar cerrada la tubería de manera abierta.

También podemos instalar una tapa registrable de características parecidas a la anterior, pero se procede de forma diferente. Lo primero que hay que hacer es aplicar adhesivo en el tubo y después insertar una base en la que irá enroscada la tapa. Una vez que ha pegado bien, colocamos la tapa y enroscamos convenientemente. Es otra forma de cancelar la tubería pero sin problemas para volver a abrirla si así lo deseamos.

 Si lo que queremos es sellar definitivamente la tubería podemos comprar una sencilla tapa de plástico con un tope en el borde. Aplicamos un adhesivo especial en el tubo y dejamos que actúe, después introducimos la tapa poco a poco y la giramos para que se impregne bien del producto adhesivo. Una vez que notamos que la tapa va pegando la introducimos a presión en el conducto y quedará totalmente cerrado.

 Otra manera, quizá menos ortodoxa, de cerrar definitivamente un conducto que sabemos no vamos a utilizar más, es calentar el extremo de la tubería con un secador y una vez que el material se pueda malear, cogemos unos alicates o una llave con la que podamos atajar bien los dos extremos y procedemos a retorcerlos bien para cerrar convenientemente la tubería.

 También en ocasiones tenemos que empalmar dos tubos de PVC (también podría ser el caso de que fueran dos tuberías). En el mercado podemos encontrar piezas de unión de distintas medidas y formas. En la mayoría de los casos encontraremos lo que necesitamos pero hay veces que esas piezas no se adaptan de la forma correcta a la curvatura del conducto. Muchas veces necesitamos que los tubos se adapten a muros, fachadas o cualquier tipo de impedimento que tengamos que salvar mediante una curva. Para tratar de solucionar ese problema no tendremos más remedio que doblar los tubos para que encajen perfectamente. Y ¿cómo lo hacemos?

 Lo que no debemos hacer es aplicar directamente calor en la zona que queremos curvar, ya que podemos estrangularla y formar arrugas que luego no podremos quitar. La mejor manera de hacerlo es taponar un extremo con papel y pegándolo con cinta de carrocero. Una vez que esté bien afianzado, llenamos el tubo con arena de manera que quede bien compactada. Luego cerramos el otro extremo de la misma manera, con papel y cinta de carrocero. Utilizamos la pistola de aire caliente para dar calor al tubo en el lugar que deseamos. Aplicamos la distancia recomendada por el fabricante y cuando notemos que el plástico esté reblandecido le damos la curvatura deseada. Después dejamos que se enfríe y quitamos los papeles de los extremos. Vaciamos el tubo de arena y comprobamos que el resultado de la curva es perfecto.

 Este es el sistema que debemos utilizar para evitar sorpresas. Parece una de esas chapuzas caseras que hacemos continuamente, pero si lo sabemos hacer, nos salvará de muchos contratiempos y podremos instalar cualquier tubo de PVC sin esfuerzo, ya que no perderá ninguna de sus propiedades y el agua circulará sin ningún tipo de problema por su interior.

 En el mantenimiento del hogar a veces es necesario ser ingenioso y elaborar un plan B para solventar los problemas que nos vamos encontrando. Esa es la clave para las reparaciones del hogar. En Grupo Veralia encontrará una amplia gama de productos para todo tipo de reparaciones de fontanería.