VENTAJAS DE LOS MORTEROS DE REPARACIÓN

Pese a ser un material de gran resistencia y durabilidad, el hormigón también se deteriora como consecuencia del paso del tiempo y la acción de diversos agentes. Por este motivo, es muy recomendable y a veces indispensable la aplicación, con la periodicidad adecuada, de un mortero de reparación estructural, que es una mezcla de componentes químicos que sirve para reparar y proteger el hormigón y otros materiales de construcción.

 

Por lo general, el deterioro del hormigón se debe, principalmente, a la degradación química, la corrosión del acero de refuerzo, la sobrecarga, los daños físicos que provocan su desgaste, especialmente, las condiciones climatológicas adversas (agua, nieve, hielo…), y, en ocasiones, la mala construcción, fallas de diseño o un mantenimiento inexistente o inadecuado.

Cómo escoger el mortero de reparación más adecuado

Existen diversos tipos de morteros de reparación, cada uno con unas características y aplicaciones distintas. Por ese motivo, la elección del mortero de reparación más adecuado al uso específico que le queremos dar es clave para poder alcanzar los objetivos de mantenimiento o reparación que nos hemos propuesto con su aplicación.

Los principales condicionantes que se deben tener en cuenta a la hora de adquirir un mortero de reparación son los siguientes:

  • Si la reparación es estructural o no estructural (cosmética). La norma UNE EN 1504-3 clasifica los morteros de reparación en 4 tipos: R1 y R2 para los morteros de reparación no estructural y R3 y R4 para los morteros de reparación estructural.
  • Ubicación del hormigón. Para reparaciones en construcciones ubicadas en zonas de costa con influencia del ambiente marino, zonas industriales y plantas de tratamiento de aguas, es necesario emplear un mortero de reparación formulado sulforresistente.
  • Grado de resistencia y elasticidad. Se recomienda emplear un mortero que tenga unas características mecánicas los más parecidas posibles al hormigón a reparar. Por lo general, los hormigones más antiguos tienen un mayor grado de compatibilidad con morteros con módulos elásticos más bajos.
  • Espesor del mortero. Es importante elegir morteros con un espesor suficiente y adecuado a la reparación que vayamos a realizar. Debemos tratar de aplicar el menor número de capas posibles (mejor si es una sola), ya que así aseguramos una mayor durabilidad y reducimos los fallos.

 

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